BUENOS AIRES.- Uno de los momentos más esperados de Gran Hermano es la clásica fiesta de los viernes que anoche terminó de manera inesperada por una actitud insólita e irresponsable de los participantes.
A los jóvenes se les terminó el alcohol que la producción les había provisto y no tuvieron mejor idea que armar una "jarra loca" con gaseosas cola y alcohol etílico, lo único disponible.
La más expuesta fue Ivana Icardi, quien justamente trajo el alcohol (aparentemente desde un botiquín de primeros auxilios). Quienes tuvieron la idea y alentaron a la hermana de Mauro, fueron Belén y Mauricio.
Al advertir la situación Gran Hermano cortó la música y le llamó la atención a los participantes, exigiéndoles que pongan el trago en el box de intercambio. "No es nada lógico lo que están haciendo", les recriminó.
¿Se vienen las sanciones?